¿Qué debo revisar de un seguro antes de contratarlo?

Todos los conductores tienen seguro del coche. Muchas familias cuentan con un seguro de hogar y otras cuantas con seguros de salud, decesos, vida… Incluso hay algunas personas que por su profesión o afición cuentan con un seguro específico para estar protegido. Otras, sólo se relacionan con un seguro en sus vacaciones, cuando contratan un seguro de asistencia en viaje o cuando alquilan un coche. Lo cierto es que todos, alguna vez en la vida, necesitamos una protección extra y nos planteamos esta pregunta. Estas son las cuatro recomendaciones que debes  tener en cuenta antes de contratar un seguro.

¿Sabemos qué debemos revisar para contratar cualquier tipo de seguro? ¿Hay algunas nociones básicas? Aquí te damos algunos consejos para que puedas identificar las cosas más importantes en las que debes fijarte cuando contratas cualquier tipo de seguro:

Coberturas

Lo más importante a la hora de revisar un seguro son las protecciones o coberturas. En los seguros de coche la cobertura obligatoria es la Responsabilidad Civil o lo que se llama comúnmente el seguro a terceros. Pero hay un amplio abanico de coberturas voluntarias que son más o menos importantes para cada tipo de conductor y sus necesidades. Lo mismo ocurre con todos los seguros. Un seguro de hogar, por ejemplo, cubre muchos servicios que a veces ni siquiera el asegurado sabe. Por eso es tan importante consultar las coberturas del contrato y ver que se adecuan a las necesidades del usuario.

Puedes echar un vistazo a Tus Coberturas para informarte sobre las coberturas más habituales que tienen los seguros de coche, hogar, salud, vida y decesos.

Límites económicos de protección

Otra de las cosas que tienes que revisar de tu seguro es el límite económico de protección en caso de usar la cobertura. Esto es muy importante, por ejemplo, cuando uno viaja. No sólo es importante saber que uno tiene la cobertura de asistencia sanitaria en el extranjero sino saber cuál es el límite, es decir, la cuantía que puedes gastar en un problema sanitario. No es lo mismo que te cojas un catarro andando por las orillas del Danubio en Budapest, que tengas un problema sanitario muy grave en medio de la selva. Es importante que para cada tipo de viaje uno lleve el seguro con los límites de aseguramiento adecuados.

Exclusiones

La otra cara de la moneda de las coberturas son las exclusiones. Es muy importante que analices tus necesidades antes de contratar un seguro genérico y des por hecho que puede cubrirte todo en cualquier situación y lugar. Por ejemplo, si te vas a esquiar y contratas un seguro para esquí es necesario que sepas que no te cubrirá si tienes un accidente fuera de pista. Otro ejemplo pueden ser los deportes de riesgo. Debes saber que aunque seas un deportista profesional, estés federado y estés muy acostumbrado a enfrentarte a riesgos extremos, los deportes de riesgo como el puenting, la caída libre, etc. tienen seguros específicos.

Periodos de carencia

La carencia de un seguro es el tiempo que transcurre entre el día en el que entra en vigor el contrato y el día a partir del cual estás protegido. Hay que fijarse en esto y uno debe saber que si tiene una intervención quirúrgica en el muy corto plazo y no está asegurado, han de pasar al menos 6 meses para que uno pueda operarse. Lo mismo ocurre con un embarazo, un trasplante o cualquier análisis clínico complejo que requiera de previo conocimiento de la aseguradora.

Publicado en el blog de UNESPA – Estamos Seguros