Aquí estamos, justo al final de las vacaciones de verano, y sintiendo que se acerca rápidamente ese momento temido: el regreso a la normalidad y a las clases en septiembre. Todos compartimos una especie de amor-odio por este mes, ¿verdad? Por un lado, nuestros hijos empiezan un nuevo año escolar lleno de oportunidades. Por otro lado, nuestro presupuesto siente la presión de los gastos escolares. Pero tranquilidad, aquí tenemos un plan.
La calma antes de la tormenta
Hay que enfrentarse a septiembre con determinación y una estrategia bien definida. Así que, mientras disfrutamos de los últimos días de vacaciones en agosto, también podemos dedicar tiempo a planificar con antelación el mes de septiembre, y reunir a la familia y juntos establecer un presupuesto realista para septiembre. Definir los gastos inevitables, como material escolar y uniformes, y asignar cantidades específicas para cada categoría. Este plan financiero os ayudará a evitar gastos descontrolados y mantener la tranquilidad financiera.
Las listas de morosos son un tema que preocupa a muchas personas, especialmente si están buscando financiación o crédito. Si estás preocupado por estar incluido en una lista de morosos, aquí te explicamos cómo saber si lo estás y qué hacer al respecto.
¿Qué diferencia una fábrica de paraguas de una aseguradora? ¿Y una aerolínea de un banco? Todas ellos son empresas y, como tales, prestan un servicio a sus clientes. Pero entre el sector financiero y otras industrias hay una diferencia: la actividad financiera se encuentra supervisada. ¿Supervisada? ¿Eso qué es? Y sobre todo, ¿por qué se la supervisa?
Vamos allá… Las aseguradoras, los bancos y las instituciones de inversión colectiva (como los fondos de inversión, por ejemplo) gestionan dinero de terceras personas. En el negocio asegurador, por ejemplo, el dinero que aportan todos los clientes sirve para pagar los percances que padecen algunos de ellos.
Pero claro, ese ejercicio debe realizarse siguiendo unos criterios de prudencia. Una aseguradora siempre debe estar en disposición de cumplir con el compromiso que ha adquirido con el cliente que les confió sus ahorros. Ya sea reintegrarle un dinero que tenía ahorrado o pagar un siniestro. ¿Y cómo se logra eso? Pues cumpliendo unos estándares de solvencia. Y aquí es donde entra la supervisión.
Los Estados cuentan con organismos que se encargan de comprobar que las entidades financieras cumplen con esos requisitos de solvencia
Que siempre tienen una cantidad de dinero razonable a mano para las peticiones que, en condiciones normales, puedan recibir. Hay muchos sistemas de supervisión financiera en el mundo pero, en España –como en la UE, por cierto–, hay tres supervisores. Seguro que te suenan. Son el Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DSGFP). Se ocupan, respectivamente, de las entidades de crédito (bancos, cajas, cooperativas, financieras…), las emisiones de títulos (acciones, bonos…) y la actividad de seguros (aseguradoras, agentes, corredores…).
La actividad financiera es un trabajo que exige una gran responsabilidad. Por eso, los supervisores exigen a las aseguradoras, los bancos y las gestoras contar con una “ficha” o licencia para operar. Además, tienen que registrarse en su correspondiente registro público para que, quien quiera, pueda comprobar que son operadores debidamente supervisados y autorizados. Cada supervisor tiene su registro. Aquí puedes visitar los del Banco de España, la CNMV y, por supuesto, el que se ocupa de los seguros: la DGSFP.
Autorización, registro, control de la solvencia… Toda esta labor que desarrolla el Estado se hace para que tú, el ciudadano de a pie, puedas confiar tu dinero a instituciones fiables. Tus ahorros son muy importantes porque contribuyen a generar riqueza y a preservarla. Ya sea financiando la construcción de unas oficinas o indemnizando el incendio que destruyó una fábrica.
En anteriores artículos hemos visto consejos para controlar las finanzas personales o algunos para ahorrar en el recibo de la luz, en esta ocasión vamos a repasar unos cuantos para que nuestra salud financiera sea la mejor posible con un simple ejercicio que debemos hacer con frecuencia: agrupar los gastos por categoría.
Reconócelo, con la llegada de un nuevo año, es inevitable proponernos cambiar cosas de nuestra vida, hacer borrón y cuenta nueva, prometernos ordenar o mejorar nuestra vida en los próximos 12 meses. Este año, te proponemos un propósito distinta para tu lista de metas a cumplir.
El clásico entre los clásicos es dejar de fumar; si es tu caso, no te desanimes, que cuantas más veces se piensa y se intenta, más cerca se está de conseguirlo. Luego está eso de ir al gimnasio; piénsalo con cuidado, no sea que acabes perdiendo a cambio de darte un par de paseos que por el parque te salen gratis. A partir de ahí, las posibilidades son múltiples: estudiar esto o aquello, escribir un libro, construir una catedral de Burgos con palillos usados…
Los expertos de UCI, entidad especialista en financiación sostenible de la vivienda, apuntan algunas claves para un hogar más eficiente energéticamente, que ayudarían a reducir el gasto medio de un hogar, estimado en 120 euros mensuales.
La utilización de placas solares de autoconsumo reduciría la factura eléctrica en un 20% y apostar por la geotermia o aerotermia para la calefacción llevaría a reducir un 70% este gasto doméstico.
La llegada del mes de septiembre supone un gran aumento del gasto con la Vuelta al Cole, que según la OCU asciende a 1.890 euros por familia. A lo que hay que sumar en esta temida cuesta de septiembre las facturas de luz, agua y gas, que de media rondan los 120 euros mensuales.
La vuelta al cole ya está aquí y es el momento de comprar (o renovar) todo lo que los chavales necesitan para enfrentarse al nuevo curso. Además de comprar los libros, los estuches, las mochilas y los uniformes, cada vez surgen nuevas necesidades y hay que meter en la lista más artículos, algunos de ellos con un coste considerable, como pueden ser las tablets, libros electrónicos, ordenadores para los más mayores, gafas o aparatos dentales… Se trata de un desembolso de dinero nada despreciable por lo que quizá merezca la pena asegurar estos productos, sobre todo sabiendo en manos de quienes van a estar.
¿Está asegurado lo que compras? La verdad es que sí. La legislación española establece un periodo de garantía de dos años (ampliable en algunos casos por decisión del fabricante o el vendedor). Con ello pone a tu disposición, como comprador, un mecanismo básico de protección para que, por ejemplo, te reparen un bien electrónico que ha dejado de funcionar por defecto de fabricación. Pero la protección de los bienes que adquieres puede ir mucho más allá de esta garantía básica y esto merece especialmente la pena en el caso de las compras muy caras, muy necesarias para ti o ambas cosas a la vez.
Y recuerda, para evitar una sanción económica de hasta 100 euros, es obligatorio exponer la pegatina de la ITV en la parte superior derecha del parabrisas delantero de nuestro vehículo.
Como cada año con el inicio de la temporada estival, el Ministerio del Interior, a través de la Dirección General de Tráfico (DGT), ha puesto especial énfasis en los controles para que todos los vehículos cumplan con la normativa de circulación de cara a la operación salida. Para evitar sanciones y, especialmente, para prevenir el riesgo de accidente o fallo técnico del vehículo, debemos ser conscientes de cuándo y cómo debemos pasar la ITV. Desde TÜV SÜD, compañía líder internacional en soluciones de alta calidad, sostenibilidad y seguridad, han elaborado una serie de consejos para evitar imprevistos y poder disfrutar del automóvil este verano de una manera segura y tranquila.
Actualmente, todavía hay muchos conductores, especialmente los más noveles, que dudan de cuándo tienen que pasar la primera inspección técnica y que no están capacitados para comprobar si su automóvil está preparado para realizar un viaje largo. El primer paso consiste en saber cuándo se ha realizado la primera ITV, que dependerá del tipo de vehículo y de la fecha de matriculación de este, visible en el permiso de circulación. A partir de aquí, la propia tarjeta ITV o el informe de la inspección anterior nos informará sobre la fecha de la renovación del examen. Incluso, el propio distintivo autoadhesivo de la ITV nos indicará el año para pasar el siguiente control a través de los diferentes colores: verde, amarillo y rojo, siendo este último el indicado para renovar la inspección este 2021.
Esta nueva tarificación de la electricidad afectará a casi 11 millones de hogares que se acogen a los precios regulados y podría suponer un 10% más del gasto, el equivalente a entre 58-80 euros al año, si no se cambian algunos hábitos.
El gas, el agua y la electricidad representan las principales partidas de gasto doméstico para muchos hogares españoles. Al año, solo el gasto medio en energía de un hogar español es de alrededor de 1.000 euros, según el IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía). De este gasto energético, la electricidad representa una de las fuentes de mayor consumo. De hecho, el mes pasado, el recibo de la luz registró la mayor subida de la historia, concretamente un 46%, tras importantes subidas al inicio del año con la ola de frío.
El recibo de la luz cambiará a partir del próximo 1 de junio en aproximadamente 10,7 millones de hogares en España. Será solo aplicable a aquellas viviendas acogidas a la tarifa regulada, también conocida como PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor). Por el contrario, no afectará a aquellos con una tarifa eléctrica de precios libres.
Tras un año de pandemia y con las vacaciones de Semana Santa a la vuelta de la esquina, son muchos los españoles que esperan disfrutar de unos días libres; pero parece que, de nuevo, las restricciones son las protagonistas en estas fechas. Aunque este año, las medidas para frenar el Covid-19 son menos estrictas que el año pasado, lo cierto es que los españoles volverán a ahorrar dinero en viajes, pero ¿qué puedes hacer con él?