Más allá del golpe emocional de gestionar el entierro de un familiar, organizar un sepelio supone siempre un trastorno tanto a nivel económico como de tramitación. De ahí que muchas personas opten por dejar este trámite en manos del seguro de decesos. Sólo en 2017, las aseguradoras atendieron el enterramiento de 256.000 personas, es decir, el 60% de los fallecidos del país.
Hay muchos días en tu vida en los que no estás para nada; pero el peor de ellos, el día en el que, realmente, solo estás para una cosa, cuando te ataca la desgracia en forma de muerte de un ser querido.
Sean cuales sean tus creencias o tus preferencias, trae aparejado un rosario de gestiones y de gastos de los que has de ocuparte en el momento menos adecuado. Tal vez darías cualquier cosa por poder librarte de todo eso. Pero, en realidad, no tienes que dar cualquier cosa; te basta con pagar la prima de un seguro de decesos.
¿Qué incluye el seguro de decesos?
El seguro de decesos es aquel que contratan las familias para que el día del fallecimiento de un ser querido todos los gastos de enterramiento estén cubiertos y las gestiones del mismo se realicen. Pero no solo eso sino también la repatriación, si fuese necesario o incluso asesoramiento en la gestión del testamento y asistencia médica o domiciliaria, para que el día en que un ser querido muere, la familia no tenga que encargarse de nada. Ya bastante tiene con lo suyo como para andar con todas las gestiones que hay detrás del fallecimiento de un allegado. En la sección, Tus Coberturas, puedes conocer con más detalle las coberturas más habituales en del seguro de decesos.
Un seguro de servicios en lugar de indemnización
Cada hora que pasa del año, en las aseguradoras de decesos españolas se reciben 30 llamadas comunicando un fallecimiento asegurado; o, si lo prefieres, el teléfono suena cada dos minutos. Un buen número de los sepelios atendidos lo son en la misma localidad donde se produce el fallecimiento; pero aquellos casos en los que hay que desplazar el entierro a otra localidad dentro de España alcanzan la no despreciable cifra de 68.000 al año; y aquéllos en los que el enterramiento se verifica fuera de nuestro país, medio centenar.
Estas cifras vienen a suponer que en torno al 60% de todas las personas que fallecen en España son atendidas por el seguro de decesos.
La mitad de las familias en España contrata este seguro pero hay españoles que son más proclives a contratarlo que otros. En la contratación de este seguro influyen elementos culturales, sentimentales y personales; cada persona es un mundo.